Este concurso de ideas proponía la construcción de las nuevas instalaciones de la planta de recuperación energética de residuos de Son Reus en Mallorca, por la necesidad de tener que realizar una importante ampliación de la actual incineradora para adecuar sus instalaciones a las necesidades futuras de la isla. Nuestra propuesta, más que un edificio o conjunto de edificios, plantea un sistema de relaciones geométricas, topográficas, volumétricas y constructivas que consigan integrar arquitectura, paisaje y ciudad. Como estrategia, difuminamos, confundimos la fachada con la cubierta y el suelo. La actual planta quedará encajada entre nuestra intervención y los taludes del vertedero. De esta manera, será la nueva planta la que se ofrezca hacia el acceso, mostrando una imagen más actual, acorde con las intenciones previstas de convertir la zona en un complejo medioambiental avanzado de primer orden. La gran cubierta proyectada, en continuidad con el terreno, se pliega desde su extremo sur para albergar la mayoría de las instalaciones, hasta alcanzar la cota del vertedero y conectar, a través de un puente-tubo de casi 90 m., la planta con el futuro parque sobre el vertedero (una vez esté sellado y desgasificado), para convertirse así en el punto más representativo del carácter público de la instalación, como símbolo de una sociedad comprometida con el planeta.